Noviembre/Diciembre 2015
Equilibrios fiscales estructurales en América Latina y el Caribe
Martín Ardanaz, Ana Corbacho, Alberto Gonzales y Nuria Tolsa Caballero
Articulo en portugues
La experiencia chilena en materia de incentivos a la gestión pública
Paula Darville
Articulo en portugues
El plan del Congreso para el Presupuesto 2016: una visión alarmante
Joel Friedman, Richard Kogan e Isaac Shapiro
Articulo en portugues
Nota Editorial
Son muchos los debates que permanentemente tienen lugar entre los técnicos y especialistas en temas presupuestarios de diversos países sobre la mejor manera de administrar los recursos públicos.
Aumentar la productividad del personal de la administración pública sigue estando en medio de estas grandes discusiones, que tienen por objetivo mejorar las técnicas para arribar a la optimización del gasto y obtener mejores resultados. Incrementar la productividad del sector público constituye un desafío que tiene por objetivo aumentar la provisión de bienes y servicios. No se trata de una tarea sencilla por la ausencia de precios, dado que los bienes públicos se consumen colectivamente. En cualquier caso, hay acuerdo entre los especialistas en que los incentivos al personal de la administración pública son necesarios para motivar a los funcionarios y mejorar la productividad. Los incentivos son considerados por el Banco Intera- mericano de Desarrollo como uno de los pilares más importantes sobre los que se asienta el modelo llamado de Presupuesto por Resultados para el Desarrollo (PPRD).
Por otra parte, son muchos los países que en los últimos años han decidido establecer sus marcos de política fiscal en función de relaciones que tienen por objetivo el equilibrio ajustado cíclicamen- te, también llamado balance estructural. Esta decisión constituye un verdadero esfuerzo tendiente a resolver los problemas que se deri- van de la volatilidad fiscal en conjunción con políticas procíclicas. Uno de los problemas es que la estimación de los saldos estructu- rales está relacionada con una buena cantidad de desafíos metodo- lógicos, entre los que se incluye el “grado de incertidumbre” de las estimaciones. A pesar de las dificultades que el desafío presenta, la lógica para hacerlo, tal como se menciona en uno de los artículos que se incluyen en esta edición de la Revista Internacional de Pre- supuesto Público, es en principio convincente: políticas fiscales basadas en normas que permitan que los estabilizadores automáti- cos funcionen libremente durante el ciclo y ayuden a acumular los excedentes fiscales en los buenos tiempos.
En términos generales, el equilibrio fiscal y la buena administra- ción establecen márgenes más adecuados para las decisiones polí-ticas y mejoran las condiciones en las que deben darse los debates de carácter estrictamente agonal sobre temas presupuestarios, que son aquellos en los que se discuten las consecuencias políticas de ciertas decisiones que afectan a importantes sectores de la pobla- ción o a áreas estratégicas del Estado. Tal es el caso de la actual discusión presupuestaria en los Estados Unidos.
Los trabajos elaborados por técnicos y especialistas en materia de presupuestos y finanzas públicas que conforman este número de la Revista tratan sobre estos temas.
El artículo titulado Equilibrios fiscales estructurales en América Latina y el Caribe, preparado por Martín Ardanaz, Ana Corbacho, Alberto Gonzales y Nuria Tolsa Caballero, presenta una gama de estimaciones del equilibrio presupuestario estructural y las utiliza para analizar el comportamiento cíclico de la política fiscal en Amé- rica Latina y el Caribe. En los últimos años, un número creciente de países ha comenzado a anclar sus marcos de política fiscal en tér- minos de normas que apuntan al equilibrio estructural o cíclicamen- te ajustado (en comparación con el equilibrio existente) en un esfuerzo por superar problemas de prociclicalidad y volatilidad fiscal. La lógica para hacerlo es en principio convincente: políticas fiscales basadas en normas permiten que los estabilizadores automáticos funcionen libremente durante el ciclo y ayudan a acumular los exce- dentes fiscales en los buenos tiempos. Sin embargo, la estimación de los saldos estructurales está sujeta a un número de desafíos metodológicos, que incluyen el grado de incertidumbre de la esti- mación. El artículo encuentra que la gama de estimaciones puede ser grande para algunos países, especialmente aquellos que obtie- nen ingreso fiscal sustancial de actividades relacionadas con mate- rias primas. Asimismo, la evidencia muestra que, en promedio, la región ha seguido un patrón de política procíclica: un incremento del 1% en la brecha productiva se asocia con un deterioro de hasta 0.66 puntos porcentuales en el equilibrio primario estructural. Este patrón esconde una heterogeneidad sustancial: la prociclicalidad es más marcada en los países que enfrentan shocks comerciales, pero puede ser contrarrestada por una mayor calidad institucional.
El artículo de Paula Darville que lleva por título La experienciachilena en materia de incentivos a la gestión pública, revisa, siste- matiza y complementa información respecto a incentivos mediante una descripción del principal sistema de incentivos institucionales que se ha desarrollado en Chile desde el año 1998. El trabajo des-cribe los objetivos que tuvo el sistema desde su creación y repasa las modificaciones que ha experimentado a través del tiempo, así como algunos resultados e impactos que ha tenido su aplicación.
Por último, se incluye un trabajo de Joel Friedman, Richard Kogan e Isaac Shapiro titulado El plan del Congreso para el Pre- supuesto 2016: una visión alarmante, en el que se analiza la reso- lución correspondiente al presupuesto 2016, que el Congreso adop- tó el 5 de mayo sólo con los votos republicanos. La opinión de los autores es que esta resolución representa una visión alarmante para el futuro fiscal del país porque propone recortar casi US$5 billones de los programas no vinculados a defensa en el próximo decenio, contrayendo gran parte del Estado a niveles no vistos en la era moderna. Por otra parte, concentra casi dos tercios de estos recor- tes en programas que atienden a personas con medios limitados. En caso de ser implementado, el plan llevaría, según los autores, a decenas de millones de personas a perder su seguro de salud o a quedar sub-asegurados, reduciría la asistencia alimentaria básica para grandes cantidades de familias e individuos de bajos ingresos, disminuiría el apoyo a millones de familias trabajadoras que tienen dificultades para llegar a fin de mes y dificultaría pagar la universi- dad a los estudiantes de ingresos medianos y bajos.
Con estas contribuciones, que seguramente suscitarán hondos debates, la Revista Internacional de Presupuesto Público acerca a sus lectores algunos de los últimos temas analizados por especia- listas en presupuestos y administración financiera pública.